… es más que un sueño una realidad para mujeres como Aissatou, Fatima, Isatou y Bay, que trabajan día a día entre nosotr@s para que millones de niñas de entre 4 y 10 años (6000 al día, unos 130 millones en total, según estimaciones de UNICEF) no sigan sufriendo esta práctica mal relacionada en ocasiones con cuestiones étnicas, culturales o religiosas.

Que sean precisamente mediadoras africanas las que accedan a las familias, desmonten mitos y ayuden a afrontar la presión familiar y social en los países de origen, implicando a hombres con responsabilidades sociales y religiosas de su comunidad ayuda, no sólo a las menores en riesgo, sino a tod@s nosotr@s, para que caiga el velo de la imagen que mantenemos de la mujer africana como sumisa y pasiva.

Nos lo contaban recientemente Julia Moreno y Guillermo Algar, de Médicos del Mundo en 3500 Millones, y es bueno recordarlo en este Día Internacional contra la Mutilación Genital Femenina.